Los molinos de viento que coronan los cerros de Herencia (Ciudad Real) participan de esa doble y privilegiada calidad simbólica y utilitaria pero tienen, además, su propia historia local que demuestra la complejidad de lo que se llama tan abstractamente el fin del antiguo régimen y la llegada del liberalismo. Menos conocida y gloriosa quizá que la de los de los pueblos que se han adjudicado la ubicació n de los molinos contra los que luchó el Ingenioso Hidalgo, la historia de un molino particular en Herencia no es por ello menos curiosa e importante.
